Entonces, ¿qué es el acné?
Las 6 etapas del acné.
Puntos negros, comedones, imperfecciones, marcas... llamalos como quieras, el acné afecta a la mayoría de los adolescentes y a una buena parte de la población adulta también. Esta condición causa la aparición de diferentes tipos de imperfecciones en el rostro, espalda o pecho, pero ¿qué es lo que causa el acné y cómo trabaja?
La biología detrás del granito
Etapa 1
El acné es una afección cutánea que se produce debido a cambios en nuestros niveles hormonales, sobre todo en la pubertad y durante la adolescencia. Las hormonas conocidas como andrógenos se comunican con las glándulas que secretan sebo en pequeñas aberturas de la piel llamadas folículos.
En esencia, el acné es un mal funcionamiento del combo glándula sebácea-folículo. Normalmente, el sebo protege la piel con una capa resistente al agua, pero los cambios hormonales hacen que la secreción ocurra a toda marcha, haciendo la piel mucho más oleosa.
Etapa 2
se producen cambios en las células de la superficie de la piel, así como en el revestimiento de los folículos. La capa superior de la piel se vuelve más espesa y pegajosa bajo la influencia de las mismas hormonas. ¿Resultado?
Etapa 3
Los folículos se tapan con una mezcla pegajosa de células y sebo. Se forman puntos negros, en donde esta mezcla se oscurece al contacto con el aire, o puntos blancos, si queda sellada bajo la superficie.
¿Listos para la etapa 4?
Aquí es donde una molesta bacteria llamada P. Acnes toma protagonismo. Se multiplica en ambientes sin aire como poros bloqueados y causa inflamación. Las consecuencias: manchas rojas elevadas, pústulas o incluso a niveles más profundos, lesiones agudas llamadas nódulos y quistes.
Etapa 5
Es la operación de limpieza. Mega células de eliminación de residuos llamadas macrófagos aparecen en escena, eliminando los tejidos dañados y estimulando la piel para iniciar finalmente la reparación del daño. Esto puede llevar desde días a semanas, dependiendo de la gravedad.
Etapa 6
es la operación de limpieza. Mega células de eliminación de residuos llamadas macrófagos aparecen en escena, eliminando los tejidos dañados y estimulando la piel para iniciar finalmente la reparación del daño. Esto puede llevar desde días a semanas, dependiendo de la gravedad.